domingo, 9 de junio de 2013

EDITORIAL DIM


      Esperamos que os resulte interesante. ¡FELIZ DOMINGO!


Este organismo de las Órdenes benedictinas y cistercienses, que se llama el D.I.M., tiene por finalidad promover en el seno de nuestras comunidades monásticas una toma de conciencia de la importancia del diálogo entre el cristianismo y las otras grandes tradiciones religiosas de la humanidad. Tampoco está de más recordar un poco el origen de este organismo. Fue en 1974 cuando el cardenal Pignedoli, presidente del Consilium para el diálogo con las religiones no cristianas pidió, en una carta al Abad Primado de los Benedictinos, que las Ordenes monásticas asumieran un papel de liderazgo en este diálogo, dado que la experiencia monástica tenía  cosas en común con cada una de las principales grandes religiones. En respuesta a esta petición fue creado un Secretariado DIM internacional que tenía a su vez secretariados nacionales en varios países de diversos continentes.  Es por ello que la actividad del DIM siempre se ha realizado en estrecha colaboración con el Consejo Pontificio para el Diálogo interreligioso y, de hecho, el secretariado del DIM es consultor de este Consejo Pontificio.

            En una ocasión Mons. Michael Fitzgerald, recordaba que la sensibilidad al diálogo interreligioso no debía ser una especie de hobby de uno u otro monje o monja de la comunidad, sino la preocupación de toda la comunidad.


Podríamos decir en breve que, el objetivo principal del DIM no es simplemente  el reunir a los monjes y monjas de nuestras comunidades que ya están implicados en el diálogo interreligioso, sino más bien el de sensibilizar al conjunto de nuestras comunidades, primero a la riqueza de las otras religiones, luego a la importancia de una actitud de diálogo y consideración. Para ello necesitamos encontrar los medios de ayudar a nuestras  comunidades, en su conjunto, a conocer mejor y apreciar la riqueza de todas las grandes tradiciones religiosas de la humanidad, sobre todo – pero no solamente- en su dimensión monástica.

En un mundo donde algunos quieren ver un choque entre civilizaciones y culturas, es importante que los monjes y monjas – cuya vida entera tiene una dimensión de comunión-, trabajen con su vida y con su diálogo para una comunión entre las religiones así como entre las culturas y los pueblos.

2 comentarios:

  1. Alicia9/6/13

    Igualmente....feliz Domingo!

    Ya os echabamos de menos por aquí.

    Gracias por la infromación

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  2. Gracias por seguir nuestro blog, Alicia. Un abrazo

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