Santa Gertrudis y nueva web del Monasterio

Sor Mercedes presentando la nueva web

Ya sabéis que el domingo celebramos Santa Gertrudis, patrona de los noviciados y las monjas nos reunimos después de Nona para celebrar su fiesta y sor Mercedes presentó la nueva página web del Monasterio, que tiene muy buena pinta, las monjas se quedaron admiradas.

La dirección de la nueva web, aún en proceso de construcción http://www.monjasyvocacion.com.

Os invitamos a visitarla y os rogamos  que nos digáis qué os parece. Agradeceremos vuestras sugerencias.

Sor Ernestina nos presentó a San Benito como patrono de los jóvenes recurriendo a los capítulos de la Regla y pasajes de los Diálogos donde se mencionan los jóvenes. Aunque en los tiempos de San Benito los niños y jóvenes fueron a menudo despreciados, él mismo los valora mucho y quiere que sean tratados con delicadeza y cariño.

A continuación recordamos con cariño, a todas las chicas que pasaron por nuestro Monasterio en los últimos 25 años buscando su camino de vida. Las seguimos teniendo presentes en nuestras oraciones.

¡Y no faltaron regalos! Para que las que estamos empezando crezcamos en la vida monástica, Nuestra Madre nos regaló unas reflexiones sobre la humildad. Ya nos podemos poner a trabajar...

Después de una merienda muy rica, preparada por el Noviciado con la ayuda generosa de la jefa de la cocina, sor Maria Eufemia, terminamos la fiesta leyendo un texto escrito por Santa Gertrudis que normalmente leemos en Maitines (por ser domingo no lo hemos leído este año), y dando gracias al Señor por el don de la vocación monástica aunque quizás no lo sepamos expresar con las mismas palabras con las que lo expresó la santa:

«Llena de gratitud, me sumerjo en el abismo profundísimo de mi pequeñez y alabo y adoro, junto con tu misericordia, que está por encima de todo, aquella dulcísima benignidad con la que tú, Padre de misericordia, tuviste sobre mí, que vivía tan descarriada, designios de paz y no de aflicción, es decir, la manera como me levantaste con la multitud y magnitud de tus beneficios. Y no te contentaste con esto, sino que me hiciste el don inestimable de tu amistad y familiaridad, abriéndome el arca nobilísima de la divinidad, a saber, tu corazón divino, en que hallo todas mis delicias.» (Sta Gertrudis: Libro de las Insinuaciones de la divina piedad).

Muchas gracias por leernos.

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