domingo, 5 de septiembre de 2010

Regla benedictina, c. 8, Oficios divinos en la noche, por Sor Eufemia Gallego

Capítulo 8
OFICIOS DIVINOS POR LA NOCHE

En invierno, es decir, desde el primero de noviembre hasta Pascua, siguiendo un criterio razonable, levántense a la octava hora de la noche, 2 a fin de que descansen hasta un poco más de media noche, y se levanten ya reparados. 3 Lo que queda después de las Vigilias, empléenlo los hermanos que lo necesiten en el estudio del salterio y de las lecturas.
4 Pero desde Pascua hasta el mencionado primero de noviembre, el horario se regulará de este modo: Después del oficio de Vigilias, tras un brevísimo intervalo para que los hermanos salgan a las necesidades naturales, sigan los Laudes, que se dirán con las primeras luces del día.

P1060384
Comentario por Sor Mª Eufemia Gallego

La oración es además de la principal actividad del monje, su hálito de vida, su respiración. Con la alabanza divina” Opus Dei”, agradecemos a Dios en nombre de todo lo creado las maravillas que ha hecho para nosotros, pero sobre todo, la entrega de su Hijo.

El “Opus Dei”es también para el monje el alimento espiritual que lo mantiene en constante oración y en íntimo diálogo con el Padre y el Hijo en el Espíritu. La importancia de este “Servicio amoroso” del monje está bien patente en el esmero que pone S. Benito en estructurar, con tanto mimo y minuciosidad la Obra de Dios.

Sirvamos con diligencia y amor a Dios y a los hermanos entregándonos a la oración con corazón dilatado procurando que concuerde nuestro ánimo con las palabras que pronunciamos.iglesia del monasterio de las Carbajalas

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Escríbenos y dinos qué opinas de la entrada