DIFICULTADES EN EL JUNIORADO
Madre Mª del Carmen, Benedictinas de León
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Planteó los objetivos de la juniora como seguir caminando hacia la profesión solemne, profundizar en el carisma monástico, madurar el sentido de pertenencia a la comunidad y afianzarse en la identidad monástica.
¿Cuáles son las dificultades? San Benito nos lo dice en el Cap. 58 cuando habla de las situaciones duras a través de las cuales se va a Dios.
De una manera general Madre Carmen resumió los diferentes tipos de dificultades:
Dificultades conmigo misma: Desencanto, soledad, sentimientos encontrados, vulnerabilidad no aceptada, miedo a resultar insignificante en la comunidad, aislamiento o refugio en el activismo, frustración porque se hunde la imagen de comunidad ideal.
Dificultades con y de la comunidad: Frustración de la comunidad porque la juniora no es tan estupenda como se esperaba. La comunidad necesita discernir qué aspectos son valores monásticos esenciales de todo aquello que es secundario y accidental.
Cada hermana es un espejo para mí. El comportamiento de la hermana denuncia mi propia conducta.
Dificultad para asumir un compromiso definitivo: Miedo a comprometerse para siempre ante la posible problemática de vivir la RB como cumplimiento.
Soluciones
- Las dificultades son necesarias, y el crecimiento no ocurre sin dolor, forma parte de la sabiduría de Dios.
- Afianzarnos en el seguimiento serio de Jesucristo.
- Es tarea de la comunidad de ayudar a vivir una donación gratuita y a identificarnos con los proyectos comunitarios.
- Siempre estar dispuestas a dejarnos acompañar y a no echar en saco roto la sabiduría de las mayores
Preguntas que Madre Carmen lanzó para el trabajo en grupo:
¿Cómo vivir el No anteponer nada al amor de Cristo, y qué dificultades encuentro?
¿Qué dificultades hay en la formación del juniorado y cómo se podría mejorar?
Cuestiones y propuestas de la mesa en común
En general nos vimos reflejadas en el tipo de dificultades que apuntó Madre Carmen de cara a vivir el seguimiento de Cristo. El gran tema candente fue el de la formación:
- Se planteó la necesidad de una formación monástica estructurada, y principalmente el diálogo se centró en cómo dicha formación se podría llevar a cabo.
- Una formación diferente a la que se ofrece en la carrera de teología y de ciencias religiosas, que abarque temas como espiritualidad monástica, liturgia, patrística y sagrada escritura.
- Finalmente se acordó hablar con Sor Conxita de San Benet, que podría organizar un curso online por Internet.
Geniales, sois geniales, siempre investigando y entrando en terrenos nuevos con toda energía.
ResponderEliminarBien se ve la mano de Dios.